martes, 12 de agosto de 2008

Nuestro parque

Corría en medio de la cuidad, tal vez podría volver, pero Martina tenia que terminar con el calvario, ya es hora de su venganza.
- Limpiar, limpiar la sangre inundada limpiar (habla eternamente con su navaja) tal vez algún día volveré a dejarte donde perteneces, pero por hoy estarás presente en cada decisión, en cada acto que haremos juntas serás mi mas fiel compañera.
Martina se para en Marcoleta con Santa lucia, mira el departamento, baja la mirada y sonríe, tal vez algún día esta caja se cierre.
- ¿qué me dices? (mira su navaja) ¿qué si me falla? Ahí Samantha tan desconfiada, pero tienes razón, mi intuición siempre falla.
Y la sombra de luz que quiso aparecer se esfumo rápidamente. Siguió caminando abandonando la idea de regresar.
Sabe a quien buscar y para esta acto no necesita planes, recorriendo Santiago se fue llenando de recuerdos antiguos, de esta vida, de esas humillaciones mas pueriles, esas humillaciones que sangraron como herida de diabético con infección de gangrena.
- Samantha ¿hace cuanto que nos encontraos con Patito Patio? ¿lo recuerdas?, no lo sé,¿fue ayer, la semana pasada, el mes pasado? Jajaja es que junto a ti los días se pasan volando. (acaricia su navaja como si fuera el mejor horrocruxe de su alma)
Sabe como encontrarla, sabe como llegar hasta ella, apresura el paso ya que es la hora de su salida, mira el reloj en la estación son las 22:30, y en umbral inmenso la ve pasar, la sigue desde cerca acechando, el caminar distraído de ricitos no a cambiado, Martina sigue a su presa serpenteando como una víbora, se aproxima al parque, aquel parque donde regalo su corazón, donde juro esperar tiempo, donde seco una flor para el reencuentro, el parque tiene el mismo olor, el parque no cambia es el ambiente perfecto para su último acto
- ¿Porqué tan deprisa? susurra Martina.
- Martina, hola ¿Qué hace aquí?
- ¿te acompaña hasta tu casa? La noche es linda y cálida y el parque esta sereno
- Ja… jajaja, pero ¿qué haces aquí?
- Es nuestro último acto
- Jajaja… tú y tus dichos
Caminaron observando la apacible noche, esta hermosa realmente, la brisa de verano peina el pelo de las chicas, refrescando la mente y el cuerpo
- ¿me acompañas al baño? (Dice martina) de verdad quiero ir al baño ja!
Se desvían del camino, un baño solitario, martina entra a la cabina simulando su necesidad
- Samantha ya es hora
- Martina ¿me dijiste algo?
- No
Martina sale del baño y abraza a sus ricitos de oro por la espalda
- ¿Qué haces Martina? Le susurra tiernamente mirándola a través del espejo
- Nuestro último acto
Martina le hace un corte profundo en la espalda de ricitos
- duele, a mi me dolió, te duele tanto como a mi ( le susurra)
Enseguida le tapa la boca atrapando un grito; Martina se da vuelta quedando cara a cara con ricitos
- esa herida que tienes a mi me dolió y me dolió ricitos y me dolió y no sano, no sana
Una carcajada macabra corto el silencio
- ¿porque esa cara tan larga? soy tu amorcito ¿no me recuerdas?
- Martina que te pasa, soy yo tu ricitos, Martina ,Martina ( grita desconsoladamente )
- Shhhttt! Calla ( y le tapa la boca) sonríe para mi por favor , sonríe te digo ( le grita) ahhh no quieres sonreír, bueno yo te dibujare una sonrisa
Martina le muestra su navaja y cumple si rito, dibujándole una gran sonrisa en el rostro conocido y alguna vez amado
- Noooooooo Martina, noooooooooo ( y la sangre inunda su boca, la inunda, la inunda)
- Cuantas veces me quebraste ricitos, mil, ¿ahh? mil, cuantas ¡ahí! ricitos eres tan linda, tú pelo oro encandilaba mis ojos, tú pelo oro enriquecía me enriquecía cada día, hasta que llego el momento y se opaco, si ricitos se opaco, apagaste la llama de mis ojos, revolcaste tu cuerpo que era mío y yo lo presencie
- Martina para, martina perdóname, perdóname
- Martina para, martina perdóname, perdóname (le repite sarcásticamente) tu crees que así se sana ¿ah? tu piensas así, no yo soy de carne y hueso, yo soy real (y le muestra un brazo y se hace un profundo corte y este se baña en sangre enseguida) ves esta sangre, la ves, siéntela ( y le refriega el brazo por la cara) ¿la sientes ahora?, esta no es ni una pizca de dolor, ahora cálmate que te tengo que cambiar tú apariencia
- No martina, ¿ que vas a hacer? ( ricitos balbucea con su boca llena de sangre)
Martina toma la navaja y empieza a cortar los ricitos de ricitos mientras le canta una canción
Todo afuera
Todo en mente
En un tiempo
Tu que dices
¿Quieres correr?
Hacia afuera
Como lo hiciste con mi vida
Volando
¿Dijiste algo?
Puedo perder
Puedo sentir
Como pasan los minutos
Honestamente esto es lo más denso
En 30 minutos de la noche
30 minutos toda una vida
En 30 minutos perdí mi vida
30 minutos palié por ti
30 minutos escribiendo tú nombre
30 minutos sintiendo rizas en mi cabeza
Un carrusel en el cielo pude ver tu silueta con él
Me perdí, no sentí
Explote pero aguante
Martina termino con su labor, corto todo el pelo de ricitos lo recoge del suelo y se los entrega en las manos; ricitos se desploma y mira su cabello llorando desconsoladamente y luego la mira. Martina se agacha y le susurra a los labios
- Mi dolor fue a veces como una fiera aullando y otras veces como niño llorando.
Se para y camina hacia la puerta sin mirar hacia atrás.